miércoles, 23 de noviembre de 2011

No te dejes manipular.

Mientes, es lo único que sabes hacer, no parabas de decirme que me ibas a cuidar, y aquí me tienes con una
brecha en la cabeza y desangrándome, porqué, pues yo al principio pensaba que me lo merecía, ya que una
discusión tras otra podía hacer que tú te enfadases conmigo y me pegases un bofetón de vez en cuando, pero
después me fui dando cuenta que las discusiones eran porque te habías esnifado  cocaína de tal modo que
estabas hasta las cejas y olías tanto a alcohol que era imposible no saber que te habías tomado unas cuantas
copas de más, ¿Y ahora que hago? A mi lo más seguro es que me queden horas de vida, tanta sangre he
perdido por tu culpa que es imposible que el médico pueda arreglar algo, ¿Y que pasara contigo? Fijo que
pasarás noches en el calabozo, pero el mismo día que digas que has aprendido la lección, te soltarán como a un
pájaro libre, ¿Y te lo mereces?, bueno mejor dicho.. ¿Se lo merecen los 70000 hombres que matan a su pareja?
Igual la justicia dice que sí, pero mi muerte no la va a remediar tu libertad.. Al fin y al cabo, eres un asesino...

No hay comentarios:

Publicar un comentario